En un solo terremoto pueden perder la vida decenas de miles de personas. Hace tiempo que los investigadores tratan de hallar un buen precursor sísmico que permita dar la alarma. Nuevas observaciones indican que los electrones de la ionosfera se agrupan antes de un temblor, a veces con más de 30 minutos de antelación. Eso podría constituir una señal de alerta temprana. Anteriormente ya ha habido falsas promesas sobre métodos de predicción sísmica, así que algunos han recibido la idea con escepticismo. No obstante, los datos convencen cada vez a más científicos.