Este trabajo analiza si los retos específicos de la adolescencia y de la adopción pueden repercutir en la autovaloración de los adolescentes adoptados. Participaron un total de 618 chicos y chicas de entre ocho y 16 años (105 adoptados y 513 no adoptados) residentes en Andalucía. Para las comparaciones, participaron tres grupos de no adoptados (compañeros actuales de los adoptados, chicos en acogimiento residencial, y chicos que viven con sus familias biológicas en contextos sociales desfavorecidos). Fueron utilizados: el Perfil de Autopercepciones para Adolescentes, la escala de autoestima de Rosenberg y la Escala de Satisfacción Vital. Los resultados reflejan autovaloraciones positivas como media en los inicios y durante la adolescencia. Se da un descenso en la autopercepción, autoestima y satisfacción vital en torno a los 11 o 12 años, pero a partir de los 14 años hay una ligera recuperación. Esta tendencia se da en adoptados y en no adoptados. Los chicos adoptados presentan autovaloraciones similares a los grupos que viven con su familia biológica. Los chicos en acogimiento residencial manifiestan una autopercepción, autoestima y satisfacción vital muy inferiores al resto
This paper analyses whether the specific challenges of adolescence and adoption may affect the self-assessment of adopted adolescents. A total of 618 children and adolescents from Andalusia (southern Spain) between eight and 16 years of age (105 adopted and 513 non-adopted) participated in this study. For comparison purposes, different groups of non-adopted children (current classmates, children in residential care and children who have grown up with their biological families in socially disadvantaged areas) also participated. The Self-Perception Profile for Adolescents, the Rosenberg Self-Esteem Scale (RSE) and the Students� Life Satisfaction Scale (SLSS) were utilized. The results reflect positive self-assessments on average at the beginning and during adolescence. There is a decline in self-perception, self-esteem and life satisfaction at around 11 or 12 years, with a slight recovery beginning at the age of 14. This trend occurs in adopted and non-adopted children and adolescents. Adopted children present self-assessments similar to children who live with their biological family. Children in residential care exhibit self-perception, self-esteem and life satisfaction that is well below the rest