Introducción y desarrollo. Los trastornos del espectro autista (TEA) se caracterizan por la alteración de tres áreas de la conducta, la alteración cualitativa en la interacción social recíproca, la alteración cualitativa en la comunicación y patrones de conducta, y actividades e intereses restrictivos, repetitivos y estereotipados. El trastorno específico del lenguaje (TEL) es un trastorno del lenguaje lento y retrasado respecto a su edad cronológica, que no tiene relación con un déficit sensorioauditivo, déficit motor ni trastorno generalizado del desarrollo. En ambos trastornos, la epilepsia tiene un papel importante. Las investigaciones del Dr. Muñoz Yunta se centraron en estudiar los TEA y los TEL mediante magnetoencefalografía, con el fin de encontrar actividad epileptiforme en áreas cerebrales precisas. Conclusiones. Los pacientes con TEA presentaban actividad epileptiforme específica predominantemente distribuida en las áreas perisilvianas. En los pacientes con síndrome de Asperger, la actividad epileptiforme se encontró principalmente en el hemisferio derecho. En los pacientes con autismo, no se observó actividad epileptiforme lateralizada, aunque había actividad predominante en el hemisferio izquierdo. En los pacientes con TEA, se encontró actividad epileptiforme subclínica en las áreas perisilvianas. Los pacientes con TEL presentaban actividad epileptiforme en las regiones frontales y temporal media de ambos hemisferios. La magnetoencefalografía permite distinguir entre pacientes con TEA y pacientes con TEL.