La violencia, la indisciplina y el caos en las escuelas están en aumento. Frente a este fenómeno, la institución oficial (Ministerio y Consejería de Educación) propone una Carta de Derechos y Deberes como respuesta e instrumento para resolver los conflictos (vía sanciones) escolares. En este artículo analizamos la propuesta oficial, sus consecuencias tanto para el alumnado como para el profesorado y adelantamos una alternativa real menos punitiva