El autor reivindica el papel didáctico del discurso en el aula. Desde su punto de vista, en los últimos años, se ha enfatizado en demasía la presentación de materiales didácticos en detrimento de considerar como el propio discurso producido en el aula. De hecho, el autor considera que, mas allá de ser considerado como input comprensible, el discurso producido en el aula ha tenido una relevancia poco importante y, por eso, en el marco de la construcción de un discurso significativo en la relación profesor- alumno como base del progreso docente, el papel didáctico del discurso en el aula pasa a ocupar un lugar principal.