Aldert Vrij, Sharon Leal, Haneen Deeb, Ronald P. Fisher
Antecedentes: A veces las personas mienten deliberadamente omitiendo información. Las mentiras por omisión pueden tener tamaños diferentes: los mentirosos pueden omitir más o menos información a propósito. Analizamos el efecto del tamaño de la omisión en los indicios verbales asociados al engaño. Método: Un total de 152 participantes siguieron a un hombre durante una misión, en la que éste se encontró con otras dos personas. En la subsiguiente entrevista, a los que decían la verdad se les pidió que narraran todo lo que podían recordar y a los que mentían con una ligera omisión que omitieran un encuentro y a los que mentían con una gran omisión que omitieran ambos encuentros. Los análisis se centraron en las partes de misión que todos los participantes contaron con sinceridad. Se distingue entre información esencial (omisión de información adyacente a la misión) e información no esencial (omisión de información no adyacente a la misión). Se analizan los detalles externos, contextuales e internos, las complicaciones, detalles de conocimiento común y las estrategias de auto-justificación. También se midieron las estrategias de los participantes. Resultados: Los que decían la verdad informaron de más complicaciones que ambos grupos de mentirosos, tanto en las partes esenciales como en las no esenciales de la información. Los mentirosos tendían más que los sinceros a simplificar su relato. Conclusión: Se refuerza la idea de que los mentirosos tienden a simplificar su relato y que, tal vez por ese motivo, las complicaciones aparecían como indicadores de veracidad.
Background: People sometimes lie by deliberately leaving out information. Such omission lies can have different sizes: Lie tellers can deliberately omit less or more information. We examined the effect of omission size on verbal cues to deceit. Method: A total of 152 participants followed a target person during his mission in which he met two other persons. In the debrief interview, truth tellers reported all they could remember; small-omission lie tellers omitted one meeting and large-omission lie tellers omitted both meetings. The analyses focused on the parts of the mission all participants reported truthfully. We distinguished between essential information (parts of the mission surrounding the omission) and non-essential information (parts of the mission that were not close to the omission). We examined external, contextual, internal details, complications, common knowledge details, and self-handicapping strategies. We also measured participants’ strategies. Results: Truth tellers reported more complications than both groups of lie tellers in both the essential and non-essential information parts. Lie tellers were more than truth tellers inclined to keep their story simple. Conclusion: It further supports the notion that omission lie tellers are inclined to keep their stories simple and that, perhaps because of that, complications emerged as a veracity indicator.