Salamanca, España
El presente trabajo se enmarca dentro de la línea temática Educación del IV Congreso Iberoamericano de Investigación en Sociedad, Educación y Psicología, en concreto en la línea de trabajo, Innovación Docente. El punto de partida se hallaría en los problemas y desafíos sociales y educativos descritos en los informes de las instituciones internacionales referentes en materia educativa. La UNESCO (2015; 2017; 2022), la OCDE (2023b), la Unión Europea (Consejo de Europa, 2021), o la Santa Sede (Dicasterio para la Cultura y la Educación, 2013; 2014; 2017; 2022; Papa Francisco, 2019; 2020b), subrayan la gravedad del panorama de deshumanización de la sociedad y de la persona, así como los problemas derivados de la convivencia multicultural. La cuestión social convertida en cuestión antropológica necesita urgentemente de la educación (Benedicto XVI, 2009, n. 75; UNESCO, 2015; Marope, 2017) desde un enfoque estratégico (Consejo de Europa, 2021; OCDE, 2020). Se considera que el cambio de paradigma educativo requiere educar a las jóvenes generaciones en la Competencia en Humanismo Integral y Solidario. Por medio de ella se pueden perfeccionar los perfiles de salida del alumnado propuestos por la LOMLOE, avanzar en la consecución del ODS 4 Educación de Calidad y favorecer la construcción de la personalidad social del alumnado y su comprensión de la vida, el mundo y las personas. El estudio pretende contextualizar, traducir y sintetizar todo este pensamiento en materia educativa. Para ello, en primer lugar, se exponen los actuales escenarios sociales y educativos; seguidamente, se presentan, como propuesta para iniciar el cambio de paradigma educativo, los fundamentos de la nueva antropología descrita en el Pacto Educativo Global. En tercer lugar, se ofrece como innovación didáctica el diseño de la Competencia Clave en Humanismo Integral y Solidario. Y, por último, se justifica como educar en el aula en la cultura del diálogo, del encuentro y del cuidado desde edades tempranas, se convierte en un elemento indispensable al servicio del nuevo humanismo constructor de la dimensión social de las nuevas generaciones y modelo de convivencia alternativo a la cultura del descarte e individualismo actual.
This paper is framed within the thematic line of Education at the IV Ibero-American Congress on Research in Society, Education, and Psychology, specifically within the line of work on Teaching Innovation.The starting point lies in the social and educational problems and challenges described in reports from leading international educational institutions. UNESCO (2015; 2017; 2022), the OECD (2023b), the European Union (Council of Europe, 2021), and the Holy See (Dicastery for Culture and Education, 2013; 2014; 2017; 2022; Pope Francis, 2019; 2020b) emphasize the seriousness of the dehumanization of society and the individual, as well as the problems arising from multicultural coexistence. The social issue, turned into an anthropological issue, urgently requires education (Benedict XVI, 2009, n. 75; UNESCO, 2015; Marope,2017) from a strategic approach (Council of Europe, 2021; OECD, 2020). It is considered that the shift in the educational paradigm requires educating young generations in the Competence in Integral and Solidary Humanism. Through this competence, it is possible to enhance the student profiles proposed by the LOMLOE, advance towards achieving SDG 4 Quality Education, and promote the construction of students' social personality and their understanding of life, the world, and people.The study aims to contextualize, translate, and synthesize all this educational thought. To achieve this, firstly, the current social and educational scenarios are presented; secondly, the foundations of the new anthropology described in the Global Compact on Educationare presented as a proposal to initiate the shift in the educational paradigm; thirdly, the design of the Key Competence in Integral and Solidary Humanism is offered as a didactic innovation. Finally, it justifieshow educating in the classroom in the culture of dialogue, encounter, and care from an early age becomes an indispensable element in the service of the new humanism, building the social dimension of the new generations and providing an alternative model of coexistence to the current culture of waste and individualism