Julieta Sosa, Hernán López Morales, Marcela Carolina López
Introducción: La soledad es una experiencia subjetiva dolorosa de aislamiento y se caracteriza por la percepción de una discrepancia entre las necesidades sociales y lo que ofrece el ambiente. El apoyo social percibido refiere a la percepción del grado de adecuación y disponibilidad de la ayuda brindada por las redes sociales. Ambos constructos han sido asociados con la depresión de muy diversas formas, aunque aún no se sabe con precisión de qué manera se vinculan. Objetivo: Poner a prueba un modelo de mediación donde el apoyo social es la variable mediadora entre la soledad y la depresión. Metodología: La muestra estuvo integrada por 2376 adultos argentinos de ambos sexos que participaron del proyecto Argentino “Impacto emocional del aislamiento por Covid-19”. Se administró la Escala de Soledad UCLA-R, el Inventario de Depresión de Beck y la Escala Multidimensional de Apoyo Social. Resultados: las regresiones jerárquicas ajustadas (Rajust=.33, p<.01) reportan que mayores niveles de soledad (β=.36, p<.01) y menores niveles de apoyo social predicen un aumento en los niveles de depresión (β=-.22, p<.01). El modelo de mediación propuesto indica que la influencia de la soledad sobre los niveles de depresión se encuentra mediada por el apoyo social percibido (efecto indirecto= .61, 95% IC= .47/.74, Rajust=.31). Discusión: Los resultados encontrados son compatibles con estudios precedentes que han remarcado que las personas solitarias suelen percibir de manera más negativa a los demás, lo que lleva a una percepción deficiente del apoyo social. De acuerdo con la teoría del efecto amortiguador del apoyo social, esta percepción impacta de manera negativa en la salud mental. De modo que, la presencia del apoyo social como variable mediadora permite explicar parcialmente el impacto de la soledad en los niveles de depresión.