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Lérida, España
Investigaciones previas sugieren que centrarse en el bienestar junto con los tratamientos tradicionales puede ofrecer beneficios significativos para las personas con trastornos mentales. Sin embargo, históricamente los entornos clínicos se han centrado en reducir el afecto negativo en lugar de promover emociones positivas y un funcionamiento psicológico óptimo, como sugiere el modelo dual de salud mental. Este estudio piloto tuvo como objetivo evaluar la eficacia del programa GROW, una intervención positiva, para mejorar el bienestar emocional, psicológico y social y al mismo tiempo reducir el malestar psicológico. Participantes procedentes del servicio de rehabilitación comunitaria de Lleida, España, realizaron el programa GROW (n = 58). Su salud mental positiva y su malestar psicológico se evaluaron antes y después del tratamiento a través de la prueba Wilcoxon. Los resultados indicaron mejoras significativas en varias dimensiones del bienestar (satisfacción con la vida, autoaceptación, relaciones positivas e integración social) junto con una reducción del malestar psicológico, particularmente en términos de estrés. Este estudio respalda la aplicabilidad del modelo dual en la evaluación de la efectividad del programa. Destaca el valioso papel de las intervenciones positivas para mejorar la salud mental entre las poblaciones clínicas, enfatizando la importancia de equilibrar los esfuerzos para aliviar el malestar psicológico con estrategias que fomenten el bienestar y el funcionamiento positivo.
Previous research suggests that targeting well-being alongside traditional treatments may offer significant benefits for individuals with mental illnesses. However, clinical settings have historically focused on reducing negative affect rather than promoting positive emotions and optimal psychological functioning as the dual-factor model of mental health suggests. This pilot study aimed to assess the effectiveness of the GROW program, a positive intervention, in enhancing emotional, psychological, and social well-being while reducing distress symptoms. Participants drawn from the rehabilitation community service in Lleida, Spain, were enrolled in the GROW program (n = 58). Their positive mental health and psychological distress were assessed before and after treatment using the Wilcoxon test. The results indicated significant improvements in various dimensions of well-being (life satisfaction, self-acceptance, positive relationships, and social integration) alongside a reduction in psychological distress, particularly in terms of stress. This study lends support to the applicability of the dual-factor model in evaluating program effectiveness. It highlights the valuable role of positive interventions in enhancing mental health among clinical populations, emphasizing the importance of balancing efforts to alleviate distress with strategies that foster well-being and positive functioning.
