Marcial Alejandro Salinas, Kenia Berenice Burboa Ruelas, Alberto Galván Corral, Cecilia Aurora Murillo Félix
El presente estudio analiza la importancia de la educación financiera temprana en niños, enfocándose en estudiantes de quinto y sexto grado de escuelas públicas y privadas en Navojoa, Sonora, México. A través de un enfoque cuantitativo, descriptivo, no experimental y transversal, se utilizó un cuestionario para evaluar siete dimensiones del conocimiento financiero, que incluyen hábitos de ahorro, manejo del dinero y habilidades emprendedoras. Los resultados revelaron diferencias significativas entre los estudiantes de escuelas públicas y privadas, así como entre niños y niñas, siendo los estudiantes de escuelas privadas y las niñas quienes demostraron un mayor nivel de alfabetización financiera. El estudio subraya la necesidad de programas estructurados de educación financiera en las escuelas y en el hogar, especialmente en instituciones públicas donde los recursos son más limitados. Esta investigación contribuye al creciente cuerpo de evidencia que respalda la integración de la educación financiera en el currículo escolar temprano como una estrategia para reducir las desigualdades financieras a largo plazo.
The study explores the importance of early financial education in children, focusing on fifth and sixth graders from public and private schools in Navojoa, Sonora, Mexico. Through a descriptive, non-experimental, and cross-sectional quantitative approach, a questionnaire was used to assess seven dimensions of financial knowledge, including savings habits, money management, and entrepreneurial skills. Results showed significant differences between students from public and private schools, as well as between boys and girls, with private school students and girls demonstrating a higher level of financial literacy. The study emphasizes the need for structured financial education programs in both schools and homes, particularly in public institutions where resources are more limited. This research contributes to the growing body of evidence supporting the integration of financial education into the early school curriculum as a means to reduce long-term financial inequalities.