D. Rodríguez Martín, Carlos Pérez López
Resumen. La enfermedad de Parkinson (EP) es un trastorno neurodegenerativo que afecta significativamente a la calidad de vida de los pacientes. El tratamiento de la EP requiere una evaluación precisa de los síntomas motores y no motores, que a menudo se complica por la subjetividad en el informe de síntomas y la limitada disponibilidad de neurólogos. Para abordar estos desafíos han surgido dispositivos comerciales vestibles que monitorizan los síntomas de la EP de manera continua y fuera del entorno clínico. Entre los principales dispositivos se encuentran PKG™, Kinesia 360™, Kinesia U™, PDMonitor™ y STAT-ON™. Estos dispositivos utilizan tecnologías avanzadas, como acelerómetros, giroscopios y algoritmos específicos, para proporcionar datos objetivos sobre síntomas motores, como temblores, discinesia y bradicinesia. A pesar de su potencial, la adopción de estos dispositivos es limitada, debido a preocupaciones sobre su precisión, la complejidad de su uso y la falta de validación independiente. La correlación entre las mediciones de estos dispositivos y las observaciones clínicas tradicionales varía, y la usabilidad y la adhesión del paciente son áreas críticas de mejora. Para optimizar su utilidad y mejorar los resultados para los pacientes, es esencial realizar estudios de validación y usabilidad con un número suficiente de pacientes, desarrollar protocolos estandarizados y asegurar la integración con sistemas informáticos hospitalarios.