Introducción Existen múltiples factores que pueden causar alteraciones del sueño en la enfermedad de Parkinson. La calidad del sueño y, por ende, de vida suele mejorar con terapias de estimulación dopaminérgica continua, como la infusión subcutánea continua de apomorfina.
Pacientes y métodos Presentamos un estudio observacional, retrospectivo, en pacientes con enfermedad de Parkinson avanzada tratados con infusión continua de apomorfina a los que se extendió el tratamiento al período nocturno en nuestro centro desde 2011 hasta 2022. Recopilamos datos de 37 pacientes en los que evaluamos la indicación de uso nocturno, eficacia, seguridad y motivos de retirada.
Resultados El 50% de los pacientes inició el tratamiento nocturno por complicaciones motoras, el 19% por complicaciones no motoras y el 31% por ambas. Los síntomas no motores más comunes fueron: fragmentación y alteraciones del sueño, dolor neuropático, síntomas psiquiátricos y nicturia intensa. De los 37 pacientes, 20 (54%) continuaban con el tratamiento al final del seguimiento del estudio, 16 (43%) discontinuaron la infusión y se perdió el seguimiento de uno (3%). Las reacciones adversas que llevaron a finalizar la infusión fueron: nódulos graves (dos), psicosis dopaminérgica (uno) y Coombs + con/sin anemia (uno). Cuatro pacientes finalizaron la infusión nocturna manteniendo la infusión diurna por adaptación subóptima al dispositivo. Continuaron el tratamiento los pacientes que presentaron mejoría sintomática sin efectos adversos significativos.
Conclusiones La apomorfina en infusión continua durante el período nocturno fue un tratamiento eficaz y seguro en nuestra serie.