Flor de María Gamboa Solís, Mario Orozco Guzmán, Jeannet Quiroz Bautista
Tres vértices conforman el entramado de estas reflexiones: Los sueños y su función como presagios de aquello que emergería como un destino fatídico. El lugar de las mujeres en su condición de carentes de nombre propio, desde esa posición de figura anónima movilizaban y posibilitaban el entretejido social. Finalmente, la singular experiencia del acto sacrificial dentro de una concepción de supervivencia del universo. La lectura de estos relatos se atiene a la composición de su discurso donde se anudan el orden sociopolítico con el orden mítico- religioso sustentando la subjetividad. Es propiamente el tejido simbólico del origen de un pueblo.