Fernando Gordillo León, Lilia Mestas Hernández
Las emociones son reacciones fisiológicas, cognitivas y conductuales que nos permiten adaptarnos al entorno. El incremento de la complejidad de la estructura social durante nuestro desarrollo como especie, modificó los requerimientos emocionales necesarios para favorecer la supervivencia del individuo y del grupo. Las respuestas a las demandas del ambiente fueron más flexibles y controladas para afrontar peligros que no eran inmediatos, pero que se proyectaban en el futuro y necesitaban ser previstos y abordados en el presente. Una vez conformada la estructura actual de nuestro cerebro, la plasticidad neuronal permitió un ajuste adecuado de las conductas, las cogniciones y las emociones del sujeto a un entorno físico y social en continuo cambio. Sin embargo, el mundo digital supone un nuevo reto evolutivo, porque ha modificado los parámetros de tiempo y espacio de las interacciones sociales. Esto podría ser un nuevo requerimiento del entorno, necesario para nuestra evolución como especie. Siendo optimistas, podemos pensar que lograremos adaptarnos, pero será necesario proyectarnos en el futuro y ver qué cambios debemos hacer en el presente. Estos cambios deben partir de un conocimiento adecuado del proceso de construcción de las emociones en el mundo natural, para poder replicarlo con garantías en el mundo digital.
Emotions are physiological, cognitive and behavioral reactions that allow us to adapt to our environment. The increase in the complexity of the social structure during our development as a species modified the emotional requirements necessary to favor the survival of the individual and the group. Responses to the demands of the environment were more flexible and controlled to face dangers that were not immediate but were projected into the future and needed to be foreseen and addressed in the present. Once the current structure of our brain was shaped, neural plasticity allowed for an appropriate adjustment of the subject's behaviors, cognitions and emotions to an ever-changing physical and social environment. However, the digital world poses a new evolutionary challenge, because it has modified the time and space parameters of social interactions. This could be a new requirement of the environment, necessary for our evolution as a species. Being optimistic, we can think that we will manage to adapt, but it will be necessary to protect ourselves into the future and see what changes we must make in the present. These changes must start with an adequate knowledge of the process of the construction of emotions in the natural world, to be able to replicate it with guarantees in the digital world.