El presente estudio pretende replicar los diseños experimentales realizados por Clark y sus colaboradores en 1989 para comprobar el modelo colaborativo del lenguaje. En este estudio se sustituye la tarea original con el Tangram por el videojuego Keep Talking And Nobody Explodes. A las 20 parejas participantes se les analizaron el tiempo de ejecución, número de errores, cantidad de intervenciones y número de palabras. Al igual que en el estudio original de 1987, en otra fase del experimento un tercer oyente realizó la tarea a partir de la grabación de otra pareja desactivando las bombas. Los resultados encontrados en este estudio indican la reducción en el número de intervenciones y de palabras a lo largo de los ensayos, así como el descenso del número de errores y tiempo empleado. No se encontraron diferencias entre el desempeño de la tarea llevada a cabo por parejas y los oyentes ajenos a la comunicación. Estos datos sugieren que, en efecto, el lenguaje tiende a seguir el modelo colaborativo basado en referencias comunes.
The present study attempts to replicate two experimental designs conducted by Clark and his colleagues in 1989, testing the collaborative model of language. In this study, the Tangram task is replaced by a bomb defusal task using the video game Keep Talking and Nobody Explodes. A total of 20 pairs of participants were analyzed based on time taken, number of errors, number of speaking turns, and word count. Similar to the original 1987 study, in another phase of the experiment, a third person (an overhearer) performed the task by listening to a recording of another pair deactivating bombs. The results of this study indicate a reduction in the number of interventions and words across the trials, as well as a decrease in the number of errors and time spent. No significant differences were found between the performance of pairs carrying out the task and that of non-communicating listeners. These data suggest that language does indeed tend to follow a collaborative model based on common references.