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Marbelys Guevara Rodríguez, Bettsy Bell Bosch Rodríguez, Arlán Machado Rojas
Los accidentes cerebrovasculares isquémicos conforman un grupo de afecciones de la vasculatura cerebral resultante de la oclusión de un vaso suplementario del encéfalo. Definir el pronóstico de estos pacientes durante la fase aguda, es un complejo ejercicio de estimación, pues intervienen diversos e interrelacionados factores. El objetivo del presente trabajo consiste en estimar la posible relación entre la Arquitectura del Sueño y el pronóstico clínico, vital y funcional de pacientes con Infarto Cerebral Total de la Circulación Anterior (ITCA) durante la fase aguda. Se realizó un estudio analítico, longitudinal, en 35 pacientes adultos con ITCA, desde marzo 2017–marzo 2018. El pronóstico global y sus categorías se evaluaron utilizando las escalas de NIHSS, Índice de Barthel y Rankin modificada. De la estadística inferencial se aplicaron el test de independencia basado en la distribución Chi-cuadrado y la prueba t de Student. Se utilizó la regresión logística para determinar si la duración de la fase REM del sueño se comportaba como un predictor pronóstico independiente. Los resultados arrojaron que la disminución del tiempo transcurrido en la fase REM, se relacionó muy significativamente con mayor riesgo de muerte (t=-7.28; p=0.000); su duración se correlacionó negativamente con el grado de déficit neurológico (r=-0.529; p=0.001), y con el nivel de incapacidad medido por la mRS a los 3 meses del Ictus (r=-0.903; p=0.000), demostrándose además una relación muy significativa y directa con las puntuaciones del IB (r=0.868; p=0.000). La disminución de una unidad en la duración del sueño REM, multiplica en 2.29 la posibilidad del resultado no favorable en estos pacientes. Se concluyó que las alteraciones de la Arquitectura del Sueño, especialmente las que implican disminución de la fase REM, impactan negativamente en la evolución de pacientes con ITCA a corto y a largo plazo.
Ischemic strokes make up a group of disorders of the cerebral vasculature resulting from the occlusion of an extra vessel in the brain. Defining the prognosis of these patients during the acute phase is a complex estimation exercise, since various and interrelated factors are involved. The objective of this work is to estimate the possible relationship between Sleep Architecture and the clinical, vital and functional prognosis of patients with Total Cerebral Infarction of the Anterior Circulation (ITCA) during the acute phase. An analytical, longitudinal study was carried out in 35 adult patients with ITCA, from March 2017 to March 2018. The global prognosis and its categories were evaluated using the NIHSS scales, Barthel Index and modified Rankin. From inferential statistics, the independence test based on the Chi-square distribution and the Student's t-test were applied. Logistic regression was used to determine whether REM sleep duration behaved as an independent prognostic predictor. The results showed that the decrease in the time spent in the REM phase was very significantly related to a higher risk of death (t=-7.28; p=0.000); its duration was negatively correlated with the degree of neurological deficit (r=-0.529; p=0.001), and with the level of disability measured by the mRS 3 months after the stroke (r=-0.903; p=0.000), demonstrating in addition, a very significant and direct relationship with the BI scores (r=0.868; p=0.000). The decrease of one unit in the duration of REM sleep multiplies by 2.29 the possibility of an unfavorable result in these patients. It was concluded that the alterations of the Sleep Architecture, especially those that imply a decrease in the REM phase, have a negative impact on the evolution of patients with ITCA in the short and long term.
