El juego es un tipo de conducta más fácil de describir que de explicar y por la diversidad que se observa plantea diversas interpretaciones, probablemente por la aparente ausencia de un fin inmediato. Todo ello genera diversas teorías sobre la conducta lúdica, la mayoría complementarias, que ponen de manifiesto que es un tema poco estudiado, todavía inmaduro y que afortunadamente existe una gran interdisciplinariedad. No obstante por un lado están las teorías sobre el juego y por otro la descripción de la conducta que se puede abordar desde dos aproximaciones básicas: la estructuralista y la funcionalista. Vistos los planteamientos teóricos y prácticos del estudio de juego se describen los distintos tipos de juego observados en diversas especies de primates humanos y no humanos para finalmente analizar las posibles variables endógenas y exógenas que pueden condicionar este tipo de conducta.