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Adalberto Campo Arias
Médicos y otros profesionales de la salud pueden ejercer como clínicos o docentes y en estos contextos están presentes relaciones interpersonales que suscitan toda clase de sentimientos. Así, un profesional de la salud puede sentir atracción sexual por los pacientes, los familiares de los pacientes o estudiantes bajo su orientación. La prevalencia de relaciones sexuales entre médicos y pacientes en otros países oscila entre el 4 y el 11%. Mientras que la prevalencia de relaciones entre docentes y estudiantes está alrededor del 3%. Las relaciones sexuales con pacientes o estudiantes actuales se consideran siempre como una conducta no ética. No obstante, existe controversia sobre las relaciones entre médicos y antiguos pacientes. Las relaciones sexuales entre médicos y pacientes son una modalidad de abuso sexual y quebranta la autonomía del paciente. Las relaciones sexuales médico-paciente tienen consecuencias negativas legales para los profesionales y secuelas psicológicas para los pacientes. Así mismo, las relaciones sexuales con estudiantes les impactan negativamente. Los profesionales de la salud deben identificar la atracción sexual que pueden generarle algunos pacientes, es necesario estar alerta y prevenir cualquier acercamiento sexual. Sin duda, es necesario fortalecer su formación ética con el ánimo de hacer prevalecer los principios de beneficencia y autonomía.
