Carlos García de Leániz
A lo largo de la historia, la construcción de infraestructuras en los ríos para distintos aprovechamientos ha fragmentado los cursos fluviales y alterado sus ecosistemas.
La fragmentación es especialmente acusada en los ríos europeos, donde la densidad de distintos tipos de barreras transversales, en su mayoría de pequeño tamaño, es la mayor del mundo.
Para reconectar los ríos y aumentar su salud ecológica es preciso conocer el número, el tamaño y la ubicación de las barreras, así como el impacto que ejercen en cada caso. Y también debe considerarse el balance entre los beneficios y los costes que suponen desmantelarlas.