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R. Robaina Alvarez, F. Bencomo Gómez, Miguel Ángel Álvarez-González, J. L. Fernández Yero, F. Carvajal Martínez, C. Pérez Gesén, A. Olivares Torres, R. A. Fumero
Introducción. La prevención del retraso mental por hipotiroidismo congénito mediante su tratamiento precoz es uno de los grandes logros de la medicina preventiva contemporánea. Sin embargo, persisten déficit cognitivos selectivos en los niños afectados de esta enfermedad cuyo origen es todavía un tema controvertido. Pacientes y métodos. Exponemos los resultados de una cohorte de 100 niños con hipotiroidismo congénito diagnosticados en La Habana desde 1989, cuyo rendimiento cognitivo se ha evaluado periódicamente. La edad promedio de cada evaluación fue la siguiente: 1,1 años (media y desviación típica: 0,3) y 8,2 años (media y desviación típica: 1,2). Resultados. Durante los dos primeros años de vida los cocientes de desarrollo están en rangos normales, aunque la coordinación oculomotora fina se ve significativamente disminuida. La duración del hipotiroidismo fetal se asoció con el control de la postura, y la gravedad bioquímica inicial de la enfermedad con el desarrollo del lenguaje. La coordinación oculomotora no se asoció con ninguna variable de gravedad de la enfermedad ni con la eficacia del tratamiento. En la edad escolar, los cocientes de inteligencia (CI) también están en rangos normales. Un análisis de regresión múltiple indicó que el CI total puede predecirse a partir de las puntuaciones de la coordinación oculomotora en los dos primeros años y por la dosis inicial de levotiroxina. Conclusiones. Se analizan las relaciones entre las variables que pueden pronosticar el desarrollo intelectual en estos niños y se discute la hipótesis de que algunos de los déficit neurocognitivos que persisten son probablemente debidos a las influencias genéticas que existen independientemente de la excelencia del tratamiento.
