Trabajar con los padres adoptivos significa ayudarles a formar un nuevo sistema familiar. Esta tarea se complica porque cada miembro del sistema aporta sus propias ideas, creencias, valores, normas, identidad, cultura, sentimientos, etc. A la tarea de "titanes" de formar una familia se les une, además, crear las condiciones necesarias que permitan una adecuada adaptación, de forma que el menor se integre (sobre todo si hay más hijos biológicos), crezca y se desarrolle equilibradamente. El desafío es inmenso, pero en la mayoría de los casos (aunque parezca un largo y tortuoso camino) la familia llega satisfactoriamente a buen puerto. Cuando intervienen los profesionales, en los diferentes conflictos que se producen a lo largo del proceso adoptivo, lo hacen en bastantes ocasiones en aquellos que están relacionados con los Trastornos de Adaptación; por este motivo la Orientación y Terapia Familiar y de Pareja nos va a ser muy útiles en el abordaje de estos casos.