Lidia Roselló Martinelli
La aparición de la pandemia causada por la COVID-19 ha obligado a la población mundial al uso más o menos continuado de mascarillas faciales. Su uso en sí mismo supone una incomodidad ya que altera la respiración normal, puede producir irritaciones en la cara y barbilla, y en determinadas situaciones genera vaho en las gafas dificultando la visión. Pero el tema que nos ocupa es cómo afecta el uso de las distintas mascarillas al colectivo de personas con alguna limitación auditiva (alrededor del 5% de la población mundial, según la Organización Mundial de la Salud - OMS)