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Florencia Alam, María Laura Ramírez, Maia Julieta Migdalek
El presente trabajo analiza la configuración del entorno lingüístico en hogares de niños menores de dos años de distintos grupos sociales, considerando en qué medida el habla de otros niños contribuye a configurar ese entorno. El corpus comprende registros de habla espontánea en hogares de sectores medios de zonas urbanas residenciales, de sectores socioeconómicos bajos de zonas urbano marginadas y zonas semirurales empobrecidas. Se recurrió a regresiones beta para estimar si el lugar de residencia podía explicar la proporción de palabras dirigidas y no dirigidas al niño objeto del estudio por parte de otros niños. Los resultados mostraron que los niños de zonas semirurales empobrecidas y los niños de zonas residenciales escuchan mayor proporción de palabras de niños no dirigidas a ellos que los niños de zonas urbano marginadas. Sin embargo, cuando se considera el habla infantil dirigida a los niños, los dos grupos socioeconómicamente bajos, urbanos y semirurales, escuchan una proporción mayor de palabras que sus pares de zonas residenciales. Estos resultados ponen de manifiesto la heterogeneidad al interior de grupos sociales.
This present research analyses the linguistic environmental setting in homes of children under the age of two years from different social groups and looks at the extent to which the speech from other children contributes to shaping that environment. The corpus includes recordings of spontaneous speech from middle-class households in residential urban areas, from lower socioeconomic classes in marginalized urban areas and from impoverished semi-rural areas. Beta regressions were used to estimate whether place of residence could explain the proportion of words from other children that were directed, as well as those that were not directed, towards the child under study. The results showed that children from impoverished semi-rural areas and children from residential areas hear a higher proportion of non-directed words than children from marginalized urban areas. However, when child-directed speech is considered, the two lower socioeconomic groups, urban and semi-rural, hear a higher proportion of words than their residential peers. These results reveal heterogeneity within social groups.
