La tendencia actual a la integración en psicoterapia es importante. Este trabajo plantea una perspectiva crítica sobre un obstáculo y desafío principal para dicha tendencia. La integración en psicoterapia debe tratarse más como un proceso que como un producto. Para que la integración en psicoterapia contribuya al futuro de la psicoterapia no debería olvidar su espíritu inicial de Exploración, evitando y tomando precauciones frente a los enfoques Establecidos, convirtiéndose, por tanto, más en un proceso que en un producto. Este supuesto se puede relacionar, en primer lugar, con el espíritu central de la integración en psicoterapia, es decir, con un proceso continuo de respeto de los distintos enfoques psicoterapéuticos, y una actitud de trabajo en progreso. En segundo lugar, se puede relacionar con la perspectiva que se debe asumir en relación a la aparición continua de nuevos modelos integradores.