Carmen Araceli Martínez Albarracín
Para realizar este estudio hemos escogido cuatro novelas: "La Colmena", "Entre visillos", "El Jarama" y "Cinco horas con Mario". Los personajes de estas novelas se caracterizan porque hablan en las más variadas circustancias y formas: conversaciones cortadas, casi monosilábicas, o largas parrafadas, con adornos oratorios o con tópicos. Todos hablan de continuo con conversaciones a veces absurdas o anodinas. El habla de relleno viene a ser uno de los más importantes recursos del hablante con una clara función fálica. Vamos a estudiar los enlaces coloquiales que muchos autores denominan como "soportes conversacionales", o "palabras gramaticales", o "muletillas", que se utilizan fáticamente para establecer contacto. Son elementos como bueno, que, pues, pero, y, si, conque, vamos y vaya. Es interesante el estudio de estas formas porque a veces son simples introducciones preparatorias para lo que el hablante va a decir, sirven para predisponer el ánimo del oyente y a la vez, para dar tiempo al hablante a entrar en materia y a ordenar sus ideas.