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Cristina Senín Calderón, Salvador Perona Garcelán, Juan Francisco Rodríguez Testal
Las preocupaciones dismórficas hacen referencia a una preocupación excesiva por una o varias características físicas percibidas como defectos que normalmente no son observables por otras personas. El presente trabajo pretende explorar la relación entre el uso de Instagram y las preocupaciones dismórficas a través de la comparación de la apariencia, las ideas de referencia y las dificultades en la regulación emocional, así como analizar si esta relación está moderada por el género. Método: Participaron 796 sujetos (Medad = 22,49; DT = 3,56; 54% mujeres). Resultados: Los resultados mostraron un efecto directo no significativo entre el uso de Instagram y las preocupaciones dismórficas. La relación entre estas variables fue estadísticamente significativa a través de la comparación de la apariencia, ideas de referencia sobre “risas y comentarios” y las dificultades en la regulación emocional. El género no moderó ninguna relación. Conclusiones: Hombres y mujeres que hacen un mayor uso de Instagram son igualmente vulnerables a manifestar preocupaciones dismórficas, cuando tienden a comparar su apariencia con otros usuarios, tienen dificultades para regular sus emociones, y muestran sesgos interpretativos relacionados con la creencia de que otros podrían hacer comentarios o burlarse de uno mismo por sus imperfecciones. Se discuten las implicaciones de este trabajo.
Dysmorphic concern are excessive preoccupation about one or several physical characteristics perceived as defects, usually unnoticeable by others. This study was intended to explore the relationship between Instagram use and dysmorphic concerns through appearance-related comparisons, ideas of reference and problems with emotion regulation, and find out whether this relationship is moderated by gender. Method: The sample was comprised of 796 participants (Mage = 22.49; SD = 3.56; 54% women). Results: The results showed a non-significant direct effect between Instagram use and dysmorphic concerns. However, the relationship between these variables was statistically significant through appearance-related comparisons, ideas of reference about “laughing, commenting” and difficulties in emotion regulation. Gender did not moderate any relationship. Conclusions: Men and women who made the most use of Instagram were equally vulnerable to dysmorphic concerns when they tended to compare their appearance with other users, had problems regulating their emotions, and showed interpretative biases related to the belief that others could make comments about them or laugh at them because of their imperfections. The implications of the study are discussed.
