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La firma del acuerdo de paz con las FARCEP, así como la implementación del acuerdo allí firmado, ha suscitado desconfianza, polarización y animadversiones entre los colombianos. Mientras algunos sectores acadmicos del país están concentrados en abordar la paz desde sus elementos jurídicos y legislativos, las ciencias humanas, en especial la psicología, están llamadas a comprender, construir y reconstruir el tejido social, la memoria histórica y todas aquellas dinámicas culturales propias de este momento. Así, con el objetivo de analizar el papel que han cumplido y seguirán cumpliendo las construcciones simbólicas alrededor de la paz, el presente artículo rescata la teoría del símbolo de Ernest Cassirer y Paul Ricoeur como punto de referencia para comprender el símbolo y su papel a la hora de dar sentido al pasado y construir futuro. Bajo este análisis se puede observar cómo, a través de los diferentes diálogos con las FARC-EP, el símbolo de paz en Colombia, se ha cargado de significados asociados a la división, ingenuidad, desconfianza y exclusión. En este sentido, el éxito a la hora de implementar los acuerdos y construir una paz estable y duradera debería radicar, en gran medida, en la capacidad de los colombianos de construir y reconstruir un tejido simbólico capaz de resistirse a la segregación o polarización política que lo ha marcado.
The signing of the peace agreement with the FARC-EP, as well as the implementation of the agreement signed there, has caused distrust, polarization and animosity among Colombians. While some academic sectors of the country are focused on addressing peace from their legal and legislative elements, human sciences, especially psychology, are called to understand, build and rebuild the social fabric, historical memory and all those cultural dynamics of this moment. Thus, with the objective of analyzing the role that they have fulfilled and will continue to fulfill the symbolic constructions around peace, this article rescues the theory of the symbol of Ernest Cassirer and Paul Ricoeur as a reference point to understand the symbol and its role in the Time to make sense of the past and build a future. Under this analysis it can be seen how, through the different dialogues with the FARC-EP, the symbol of peace in Colombia, has been loaded with meanings associated with division, naivety, distrust and exclusion. In this sense, the success in implementing the agreements and building a stable and lasting peace should lie, to a large extent, in the ability of Colombians to build and rebuild a symbolic fabric capable of resisting the segregation or political polarization that He has marked it.
