Los factores de riesgo de la parálisis cerebral (PC) de origen prenatal, definida como anormalidad permanente y no progresiva del movimiento y la postura, son más numerosos de lo que antes se creía, cuando a menudo se suponía que la PC se debía a dificultades perinatales y, en especial, a las que acontecían durante el parto. Los avances en genética y bioquímica, asistidos por desarrollos técnicos, como el examen del líquido amniótico y las técnicas radiológicas, han permitido descubrir nuevas causas de las encefalopatías neonatales que antes se atribuían a la isquemia perinatal. Repasamos varias nociones antiguas y nuevos mecanismos de la PC, entre ellas el hipóxico o asfixia, que sólo causa el 10% de la PC en niños nacidos a término, y se manifiesta como la bien conocida leucomalacia periventricular, causante predilecta de la PC del niño prematuro. Además, presentamos diversas enfermedades genéticas que producen alteraciones bioquímicas en unos casos y malformaciones congénitas en otros, y que en ocasiones producen los dos casos. Se mencionan los factores infecciosos de la madre, que parecen asociarse con la PC en el recién nacido, aunque esto no esté demostrado. También citamos ejemplos de toxinas maternas, bien causadas por alteraciones metabólicas de la madre, como la diabetes, bien por el consumo de medicinas o drogas, que pueden producir PC. Concluimos citando los embarazos múltiples, en los que se puede dar PC, especialmente en los supervivientes de partos donde uno o más de los fetos fallece durante el embarazo.