Maritza García Montañez, María Fernanda Coronado Noroña, Javier Rodríguez Rodríguez
Siendo el Maltrato entre Pares (bullying) un proceso presente, sobre todo en las escuelas, que genera sufrimiento y trastornos psicosociales, con el Cuestionario para medir las relaciones de maltrato e intimidación (Curmic) se midió, en 20 escuelas primarias de la Ciudad de México, a 4 885 estudiantes de entre 7 y 15 años. En el salón de clases y durante el recreo, el maltrato se manifiesta mediante burlas e insultos, golpes y ostracismo. Quienes maltratan declaran hacerlo por provocación o enojo o por hacer una broma, imitando lo que sucede en la escuela y en su familia y lo que ven en los videojuegos y la televisión; también dicen sentirse culpables, tristes, malos o poderosos. Quienes observan el maltrato reportan enojo. Los docentes carecen de técnicas para intervenir objetivamente, cuando lo hacen. Tanto para estudiantes como para docentes, urge el desarrollo de capacidades, a fin de resolver los efectos y aprender estrategias de intervención oportuna, con el objetivo de prevenir.
Being the bullying (abuse peer) a present process that generates suffering and psychosocial disorders, especially in schools, through the questionnaire to measure relations abuse and intimidation (Curmic) it was analyzed in 20 primary schools in Mexico City; in 4 885 students between 8 and 11 years. Abuse comes through taunts and insults, beatings and ostracism, in the classroom and in recess. Those who mistreat declare to do so for being caused, to make a joke or for being angry, mimicking what happens at school, in video games, television or their families; they feel guilty, sad, bad or powerful. Who observe abuse, report anger. Teachers lack technics to intervene objectively whenever they do. For students and teachers, it is urgently needed capacity building, both to solve the effects, and to learn timely how to intervene, aiming to prevent.