Juan Carlos Cejudo
Las manifestaciones clínicas iniciales de la enfermedad de Alzheimer (EA) tienen un alto nivel de solapamiento con las caracte- rísticas cognitivas propias del envejecimiento normal. Inicialmente suelen haber quejas subjetivas de memoria no evidenciadas en los tests neuropsicológicos y posteriormente un periodo denominado déficit cognitivo leve (DCL), en el cual se detectan cambios en el rendimiento neuropsicológico pero cuya intensidad no produce un impacto sig- nificativo en las actividades habituales ni las relaciones interpersonales del paciente. Actualmente el diagnóstico de esta enfermedad se intenta realizar en las etapas más tempranas posibles, para ello se han desarrollado nuevas técnicas de neuroimagen y parámetros metabólicos conocidos como biomarcadores de la enfermedad de Alzheimer. De éstos la imagen PET, tanto de glucosa como la específica amiloidea y las determinaciones de proteína Tau y Beta Amiloide en el líquido cefalorraquídeo se muestran como las más relevantes, hecho que las ha llevado a considerarse actualmente en los criterios diagnósticos internacionales de la EA. Paralelamente se ha intentado obtener “marcadores” cognitivos que nos ayuden al diagnóstico temprano, no sin controversias y datos contradictorios, pero conocer cómo se deteriora la función mnésica desde la normalidad hasta el síndrome amnésico completo con estudios longitudinales descriptivos ha hecho que podamos clasificar el deterioro de la memoria episódica en diferentes estadios. Este hecho permite tener una variable de estudio más precisa, concretamente estos estadios han sido propuestos por Cejudo JC, 2016 y se muestran como categorías muy descriptivas del proceso degenerativo completo, permitiendo el aumento de la precisión diagnóstica conjunto con los biomarcadores actuales y de futuro como puedan ser los sanguíneos. El estudio de relación entre los estadios propuestos por Cejudo JC y la neuroimagen mediante PET 18 FDG aporta una nueva clasificación de los estadios pre-amnésicos y amnésicos y ha llevado también al planteamiento de nuevos paradigmas en la exploración de la memoria episódica que podrían dar un mejor alcance pronóstico en el diagnóstico de la EA.
The initial clinical manifestations of Alzheimer's disease (AD) have a high level of overlap with the cognitive characteristics of normal aging. Initially there are usually subjective complaints of memory not eviden- ced in the neuropsychological tests and then a period called mild cognitive deficit (MCI), in which changes in neuropsychological per- formance are detected but whose intensity does not produce a significant impact on normal activities or relationships interper- sonal Currently the diagnosis of this disease is attempted in the earliest possible stages, for this new neuroimaging techniques and metabolic parameters known as biomarkers of Alzheimer's disease have been developed. Of these, the PET image, both glucose and amyloid specific and the determinations of Tau and Beta Amiloid protein in the cerebros- pinal fluid are shown as the most relevant, a fact that has led them to be considered in the international diagnostic criteria of AD. At the same time we have tried to ob- tain cognitive "markers" that help us with early diagnosis, not without controversies and contradictory data, but knowing how the mnesic function deteriorates from nor- mality to complete amnestic syndrome with longitudinal descriptive studies has allowed us to classify the deterioration of episodic memory in different stages. This fact allows having a more precise study variable, spe- cifically these stages have been proposed by Cejudo JC, 2016 and they are shown as very descriptive categories of the complete degenerative process, allowing the increase of the diagnostic precision together with the current and future biomarkers such as may be the blood The study of the relationship bet- ween the stages proposed by Cejudo JC and neuroimaging using PET 18 FDG provides a new classification of pre-amnesic and amnes- tic stages and has also led to the proposal of new paradigms in the exploration of episodic memory that could give a better prognostic scope in the diagnosis of AD.