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Annette Mülberger, Cristina Gómez González, Ana María Cañas Cortázar, Michelle Cervantes, Laia Anglada Llistosella
El presente trabajo explora una aplicación pionera del test de inteligencia, realizada por médicos en Barcelona poco después de que se publicara la escala de Binet y Simon en Francia. Fue usada en 1908 bajo la dirección del médico Luis Comenge en el marco de un censo sanitario antropométrico de jóvenes ciudadanos. Un total de 5.800 escolares fueron examinados para la selección de un grupo que disfrutaría de una subvención para participar en las colonias escolares de verano. Examinamos el informe sobre las mediciones antropométricas y psicométricas que proporcionan información acerca de como se emplearon las pruebas y para qué, es decir, el objetivo y las funciones sociales de tal iniciativa. Nuestra investigación pone de manifiesto que, en este caso, el diagnóstico de debilidad o anormalidad estuvo asociado a un privilegio social. Además, este examen físico y mental de los niños, formaba parte de una estrategia más amplia que fue adoptada por los médicos y las autoridades locales para llevar algo de bienestar y paz a un sector de la sociedad que en estos años estaba sufriendo las consecuencias de una vida dura en la ciudad
The present study explores the pioneering application of the intelligence test by physicians in Barcelona, soon after the publication of Binet and Simon’s scale in France. It was conducted in 1908 under the leadership of the physician Luis Comenge, within the framework of a general anthropometric health census of young citizens. A total of 5,800 schoolchildren were examined to select those who would take part in the subsidized summer camps (colonias escolares). We study the report of the anthropometric and psychometric measurements, which provides information on how the techniques were employed and why, e.g., the aims and social functions of the undertaking. Our work shows that, in this case, a diagnosis of feebleness or abnormality led to social privilege. Moreover, this mental and physical examination of children was part of a broader strategy adopted by physicians and local authorities to bring welfare and peace to those enduring the hard and strained life of the city.
