En la actualidad, casi medio centenar de entidades médicas recomiendan intervenciones quirúrgicas destinadas a adelgazar como tratamiento contra la diabetes de tipo 2. Numerosos ensayos clínicos indican que la cirugía controla antes, mejor y durante más tiempo la diabetes, en contraste con la dieta y los fármacos. El éxito de la intervención vincula la diabetes con el intestino. Entre las razones se barajan los cambios en las hormonas intestinales, en los ácidos biliares, en la microbiota intestinal o en la cantidad de glucosa que pasa a la sangre.