Bonnie Rochman
Numerosas enfermedades graves que pueden detectarse después del nacimiento no están incluidas en las pruebas genéticas neonatales habituales.
Secuenciar por completo el genoma de recién nacidos para identificar trastornos actuales o futuros resulta técnicamente factible y en breve podría serlo también económicamente.
Se está estudiando si la inmensa cantidad de información genética que aporta la secuenciación ayudará a los padres y a los médicos a atender mejor a los recién nacidos o, de lo contrario, conllevará mayor ansiedad, dificultades y coste.