Jan Zalasievies
Aunque el ser humano ha alterado el sistema terrestre, los científicos debaten acerca de si esos cambios dejarán huellas permanentes en los estratos geológicos que definen formalmente las épocas y las eras.
Hemos diseminado aluminio, plásticos, hormigón, partículas de carbono (procedentes de la quema de combustibles fósiles), insecticidas y partículas radiactivas (liberadas por bombas nucleares) por mares y continentes. Ello favorece la declaración del Antropoceno como una nueva época.
Queda por dilucidar si la nueva época habría empezado hace miles de años, cuando comenzaron a discernirse los primeros efectos antrópicos, o si solo se iniciará en un futuro, cuando se expresen por completo las consecuencias de nuestras actividades.