Thomas C. Hart
Los fitolitos son corpúsculos microscópicos creados por la acumulación de sílice en los tejidos vegetales. Cuando la planta muere, sobreviven al paso del tiempo como muy pocos vestigios.
Su durabilidad y especificidad los convierte en soberbios testimonios de la vegetación pretérita, cuyo estudio reviste gran relevancia en disciplinas como la arqueología, la ecología o la paleontología.
Lejos de limitarse al pasado, también se investiga su uso como materia prima para aplicaciones nanotecnológicas y como sumidero de carbono para afrontar el cambio climático.