Antecedentes: el insomnio es un trastorno de elevada prevalen-cia tanto entre la población general como en la práctica clínica. Aunque el tratamiento farmacológico para el insomnio es el más extendido, es el tra-tamiento psicológico el que mantiene sus efectos a lo largo del tiempo. El objetivo principal de este metaanálisis es evaluar la eficacia de la terapia cognitivo-conductual grupal para el tratamiento del insomnio.
Método: búsqueda sistemática de ensayos clínicos de terapia cognitivo-conductual para el insomnio en Pubmed, PsycINFO, PsycARTICLES, Scielo, WOK, Cochrane, Scopus y Embase. Se revisaron 153 artículos, de los que 9 cumplieron con los criterios de inclusión para formar parte del metaanálisis. En estos 9 estudios 699 personas completaron el post-test.
Resultados: aparecen mejoras significativas con el tratamiento cognitivo-conductual para el insomnio en las escalas Pittsburgh Sleep Quality Index e Insomnia Severity Index, en latencia del sueño, en tiempo despierto des-pués de iniciar el sueño y en eficiencia del sueño. No aparecen mejoras sig-nificativas en el tiempo total de sueño.
Conclusiones: los resultados de los estudios experimentales sobre terapia cognitivo-conductual para el tratamiento del insomnio sugieren que esta tiene un claro impacto positivo sobre los síntomas, evaluados tanto me-diante escalas validadas como mediante diarios del sueño
Background: insomnia is a highly prevalent disorder in the gene-ral population and in clinical practice. Although pharmacological treatment is the most widespread choice, psychological treatment appears to have longer lasting effects. The main objective of this meta-analysis was to as-sess the cognitive-behavioural group therapy treatment for insomnia.
Method: a systematic search for cognitive-behavioural therapy clinical trials in Pubmed, PsycINFO, PsycARTICLES, Scielo, WOK, Cochrane, Scopus and Embase. 153 articles were reviewed, of which 9 met inclusion criteria for the metaanalysis. Adding up the data from all 9 trials, a total of 699 people completed the post-test phase.
Results: after finishing cognitive-behavioural therapy, significant improve-ments regarding insomnia were found according to the Pittsburgh Sleep Quality Index and Insomnia Severity Index, sleep latency, wake after sleep onset and sleep efficiency. There were no significant improvements in total sleep time.
Conclusions: the results from experimental studies on cognitive-behavioural therapy as an insomnia treatment clearly suggest a positive im-pact on symptoms, as assessed using both validated scales and sleep diaries