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Juan M. Morales Vega, Minerva Ruiz Cardales
El propósito es este estudio fue evaluar la efectividad de la orientación grupal para fortalecer el autoconcepto de estudiantes talentosos desventajados en lo social y lo económico. Dieciseis (16) estudiantes, de ambos sexos, cursando el séptimo grado de la escuela identificada como desventajada social y económica, quienes se autonominaron y fueron nominados por sus maestros como talentosos; y quienes obtuvieron índices de bajo autoconcepto en un cuestionario validado; fueron asignados tanto al grupo experimental como al control. Aquellos en el grupo experimental participaron en 10 sesiones de orientaciòn grupal diseñadas para fortalecer el autoconcepto, y aquellos en el grupo control, constituyeron un grupo de espera. El autoconcepto de ambos grupos fue medido antes y después del tratamiento mediante el Cuestionario de Descripción Propia de Marsh (1981). Los datos fueron sometidos al análisis de covarianza utilizando la preprueba como criterio para evaluar el efecto principal entre grupo. El análisis de los datos dentro de grupo se hizo utilizando la prueba T de Mc Nemar. Los análisis demostraron que hubo diferencias significativas (P<.05) en los promedios de autoconcepto a favor del grupo experimental. Dentro del grupo experimental hubo cambio significativo a favor de la post prueba (P<.05), y dentro de grupo control estas diferencias no resultaron significativas (P>.05). La evidencia permite concluir que la orientación grupal fue responsable del aumento del nivel de autoestima de los talentosos deventajados social y económicamente. El uso de orientación grupal para la enseñanza de destrezas sociales facilitadores en el enriquecimiento del autoncepto parece confirmar la idea de Marsh (1981) de la importancia de un grupo de referencia social para la expresión del talentoso desventajado en el académico y social.
