H. Tapia Pérez, J. Torres-Corzo, M. Sánchez Aguilar, Daniel González Aguirre, I. Rodríguez Leyva, Antonio Gordillo Moscoso
Introducción. La hemorragia intracerebral espontánea (HIC) es una entidad neurológica con una elevada tasa de mortalidad. Desde la aparición de las primeras guías de manejo en 1999, se han probado nuevas terapias sin éxito sustancial. Objetivo. Describir los cambios en el tratamiento de la HIC de un hospital regional mexicano y evaluar su posible impacto en la evolución clínica. Pacientes y métodos. Es un estudio retrospectivo entre 2000 y 2006 con pacientes mayores de 15 años y diagnóstico tomográficamente confirmado de HIC. Excluimos pacientes con trauma craneoencefálico en las cuatro semanas previas o puntuación inicial de la National Institute of Health Stroke Scale (NIHSS) indeterminada. Se estudiaron características epidemiológicas, clínicas y tipo de tratamiento. Resultados. Analizamos 175 pacientes con edad promedio de 62 años. La etiología y localización más frecuente fueron hipertensión arterial y lobar, respectivamente. Más del 20% requirió intubación al ingreso y sólo la mitad fue admitida en la unidad de terapia intensiva. NIHSS > 15 o Glasgow < 9 iniciales se asociaron con pobre resultado. Los inhibidores de la enzima conversora de angiotensina se usaron más frecuentemente para el control de la tensión arterial. El uso de antagonistas del calcio, estatinas y descompresión quirúrgica se asoció con un mejor resultado funcional. Conclusiones. El uso de salas de terapia intensiva es una medida fuertemente sugerida como eje del manejo de la HIC. En nuestro centro, esto no se realizó regularmente por un déficit infraestructural. Este problema podría generarse en otros hospitales mexicanos. La revisión de este fenómeno urge. Se requiere la evaluación de nuevas medidas terapéuticas.