Introducción y objetivos. Se repasan las características del delirio de Capgras, el más frecuente de los síndromes de falsa identificación delirante. Se describe su fenomenología en trastornos psiquiátricos y orgánicos, su prevalencia y la comorbilidad con otros fenómenos reduplicativos. Se revisan los modelos etiológicos que tratan de explicar el origen del delirio, tanto desde la perspectiva de la psicología cognitiva y de presupuestos psicodinámicos, como de la neuropsiquiatría y las bases neuroanatómicas. Desarrollo. Según los modelos cognitivos, el delirio de Capgras no puede entenderse únicamente como una disfunción del reconocimiento facial, sino de la persona globalmente considerada. La sensación de familiaridad está ausente por la incapacidad para integrar recuerdos sucesivos sobre una persona a lo largo de experiencias episódicas, generándose dobles delirantes de acuerdo con las necesidades y motivaciones del paciente. Desde el punto de vista neuropsiquiátrico, el delirio de Capgras aparecería por el fallo en conciliar la información sobre el reconocimiento y las emociones, producto de la desconexión entre el lóbulo frontal y las regiones temporales y límbicas (hipocampo) derechas, junto con el daño bilateral del lóbulo frontal. Los delirios se producen con más frecuencia tras lesiones derechas, porque se afectan funciones como la automonitorización, la monitorización de la realidad, la memoria y la sensación de familiaridad, considerando, además, la necesaria preservación del hemisferio izquierdo para su aparición. Conclusiones. La etiología del delirio de Capgras implica la consideración conjunta de datos clínicos, neuropsiquiátricos y neuropsicológicos integrados con los diversos modelos teóricos.