La subjetividad humana puede estudiarse científicamente. La investigación del comportamiento puede enfocarse sobre lo que se dice o lo que se hace, pero los científicos sociales y comportamentales dependen del habla y del significado para acercarse al mundo privado del sujeto. Además, para acceder a la subjetividad, sus observaciones y registros deben centrarse en interacciones dialógicas, pues la comunicación entre científicos y sujetos marca el mejor camino hacia las experiencias y representaciones de los segundos. Esto ubica necesariamente la indagación de la subjetividad en la metodología cualitativa y en situaciones de observación participante. En éstas la objetividad adquiere un valor relativo, derivado no sólo del informe del investigador sino también del relato del sujeto. Por ello es inevitable una distinción clara entre la subjetividad del observador y la del observado, de modo que las consecuencias metodológicas de la asunción de una y otra son diversas, mas no obviables. Comentamos dos de estas consecuencias: la validación émica de las interpretaciones del investigador y la negociación de las diferentes visiones que diferentes observadores tienen de un fenómeno.
Human subjectivity may be studied scientifically. Research into human behaviour is focused either on what people say or on what people do, but behavioural and social researchers depend on speech and meaning to approach the private worlds of subjects. Moreover, in order to gain access to subjectivity, their observations and records should also be centred on dialogical interaction with people, because communication between human researchers and human subjects is the best route to peoples' experiences and representations. This necessarily places the search for subjectivity in qualitative methodology and in situations of participant observation. In the latter, objectivity becomes a relative value derived not only from researchers' reports, but also from subjects' accounts. Thus a clear distinction between subjectivity rooted in the observer and that rooted in the observed actor is unavoidable so that the methodological consequences of the assumption of each one are diverse but not negligible. Two of these consequences commented in this paper are: emic validation of researchers' interpretations, and negotiation of the different observers' views on social phenomena.