M. Colodrón
Este texto recorre el camino histórico de una entidad que aún hoy llamamos esquizofrenia. Comienza este recorrido con la definición de Kraepelin de demencia precoz y prosigue con una ingente cantidad de disyuntivas de las que nacen, entre otras, propuestas de nosologías de segundo orden. La cuestión de la heredabilidad de la esquizofrenia entra en juego en la Alemania de 1933 y con ella la esterilización de los enfermos mentales. Con el litio y la clorpromazina se desplaza el interés de la esquizofrenia hacia una vertiente puramente práctica y se dejan de lado cuestiones referentes a su comprensión. Con el DSM-III se pone fin a esta andadura histórica, con la que volvemos a una realidad donde, pese a todo, la esquizofrenia aun tiene mucho por decir