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Cristina Cogoi
El interés del mundo científico en las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) se ha visto reforzado en los últimos años por la atención que la Comisión Europea dedica a este tema en sus documentos de trabajo sobre políticas de instrucción y formación.
La Quinta Conferencia Europea sobre las TIC en la orientación, «Quality and Ethics in Web-based Guidance», celebrada en junio de 2001 en Goteborg (Suecia), dio como resultado la elaboración de un Memorandum sobre el aprendizaje permanente (Comisión de las Comunidades Europeas, 2000), que incluye recomendaciones en este ámbito. Se destaca el papel de las TIC en el incremento de la calidad de los servicios, facilitando nuevas perspectivas y oportunidades dirigidas a responder a necesidades cada vez más individualizadas y diversificadas, y fortaleciendo el papel de los operadores.
La utilización de las TIC en el ámbito de la orientación es cada vez más necesaria y urgente para enfrentarse a los cambios de una sociedad sin fronteras. Respecto a los métodos tradicionales de orientación, las TIC permiten alcanzar a más personas, en lugares más distantes o en su ambiente familiar, con una gran reducción de costes. Su implantación comporta, no obstante, problemas de ética profesional, de papel de autoridad pública y de formación de los operadores en las competencias necesarias para otorgar servicios de orientación a distancia (D'Angelo, Silverii y Trevisani, 2002). Desafortunadamente, además, se perciben a menudo como una alternativa a la presencia de orientadores cualificados.
La videoconferencia es uno de los instrumentos que pueden resultar más eficaces en un futuro próximo debido a sus características técnicas, que permiten «visualizar» el contexto e «intervenir» en tiempo real. Tiene además el valor de permitir la comunicación visual entre diferentes personas, favore-ciendo el intercambio de emociones que otros instrumentos TIC (conferencia telefónica, Web, e-mail, chat) no pueden transmitir (Gardenghi y Rossini, 1999). Considerando la experiencia realizada por el Centro Nacional de Recursos para la Orientación de Bolonia, uno de los puntos de contacto en Italia de la red europea Euroguidance (http://www.euroguidance.org.uk), podemos identificar dos tipos de utilización de la videoconferencia:
o como metodología de orientación, desarrollada y testada en el ámbito de proyectos piloto co-munitarios, o como metodología de trabajo y comunicación entre socios geográficamente distantes, a menudo en sustitución de encuentros transnacionales.
Al tratarse de un instrumento todavía experimental en el ámbito de la orientación, la videoconferencia comporta a menudo problemas no sólo de tipo técnico sino también ético; a este respecto, y pese a no existir aún una solución a esta problemática, es significativo el hecho de que nos estemos dirigiendo cada vez más hacia la definición de estándares de calidad y principios éticos, compartidos a nivel eu-ropeo, en cuanto a la utilización de las TIC en orientación.
Podemos identificar cinco ámbitos principales de aplicación de la videoconferencia en la orientación:
o Comunicación entre socios distantes para reforzar las relaciones u organizar las actividades contempladas en un proyecto.
o Información, especialmente útil cuando se trata de actividades vinculadas con la movilidad en el extranjero. Actividades de este tipo se han realizado, por ejemplo, en el ámbito del proyecto piloto Open Guidance, financiado en el marco del programa comunitario Leonardo da Vinci, en el que las sesiones de videoconferencia entre los paises socios del proyecto, Francia, Italia y Alemania, se han utilizado para que expertos de la formación profesional y representantes de las empresas dialogaran entre ellos. O el proyecto @pritisesamo.net, financiado por la iniciativa comunitaria Netd@ys Europe 2000, cuyo objetivo ha sido informar a estudiantes italianos so-bre oportunidades de estudio y trabajo en Francia y Reino Unido, a través de sesiones públicas de videoconferencia entre estudiantes y recién licenciados de los tres países.
o Formación, dirigida a operadores del sector. Destaca a este respecto la realización, en el ámbi-to del proyecto Rainbow (Programa Leonardo), de un trayecto de formación en comunicación intercultural para orientadores, alternando clases presenciales con actividades de formación a distancia a través de módulos on-line y de videoconferencia.
o Asesoramiento/Orientación individual y de grupo. Este es el ámbito menos utilizado, quizá por ser el que más problemas de tipo ético comporta. Se está estudiando un proyecto de un cen-tro de orientación para adultos de Estocolmo (Suecia) que propone instalar una Web cam en los ordenadores de algunos centros y escuelas, pequeños y apartados de otros centros, que desarro-llan tareas de orientación de adultos y no tienen la posibilidad de contratar a un experto.
o Entrevistas de selección, particularmente con empresas extranjeras. Hay una experiencia pare-cida: Job Learning, un proyecto presentado por el consorcio SFERA Formazione a una convo-catoria del Fondo Social Europeo, y que cuenta con la colaboración del Centro Nacional de Re-cursos para la Orientación de Bolonia.
o En definitiva, dado que la Web cam será dentro de poco un instrumento de uso corriente, es ne-cesario evaluar sus posibilidades y limitaciones con el fin de aprovechar correctamente los recursos que nos ofrece.
This article analyses the role of videoconference technology in vocational guidance on the basis of experiences carried out under European programmes, and defines the main contexts of application.
