El enfoque de los derechos humanos y las capacidades es el marco teórico más adecuado para analizar a las relaciones entre Derecho y salud mental. A partir de la actividad de la Organización Mundial de la Salud, el artículo estudia la fundamentación filosófica y jurídica de tales respuestas y articula un modelo de cinco principios (dignidad, libertad, igualdad, protección y razonabilidad) para responder a los interrogantes que la salud mental plantea al Derecho, basado en los derechos humanos y las capacidades. En síntesis, en materia de salud mental las medidas jurídicas deben perseguir tres objetivos: capacidades, derechos y justicia.