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La Enfermedad de Alzheimer (EA) representa la acumulación progresiva de una constelación de déficits cognitivos, por lo cual la neuropsicología es central para su diagnóstico. Estos déficits cognitivos pueden ocurrir en una amplia variedad de dominios, aunque las taxonomías recientes se han centrado en los desórdenes de lenta progresión de un dominio simple (por ejemplo, lenguaje, memoria, praxias) que permanecen aislados durante gran parte de la primera etapa del curso de la enfermedad. En este documento se revisan algunos de los aspectos metodológicos relacionados con la evaluación del paciente, sugiriendo el uso de una aproximación cognitiva al diagnóstico de la EA. Adicionalmente, se revisan algunos de las más significativas contribuciones que los resultados neuropsicológicos en pacientes con EA han hecho a la comprensión del funcionamiento de la cognición normal.
