Antonio Durá Doménech, Jenaro Vera Guarinos, María Soledad Yebra Calleja
La edificación escolar española adolece de una falta de criterios de calidad acústica. Escuchar es la primera modalidad de aprendizaje y, si el canal de transmisión del lenguaje (aula) es deficiente, no se puede enseñar ni aprender. La existencia de buenos aislamientos acústicos contra el ruido aéreo y el ruido de impacto es necesaria para que exista un grado de confort tal que las actividades que se desarrollen en el aula no sufran interferencias ajenas. Si no se dan las condiciones acústicas óptimas, todo el proceso sociointelectual quedará invalidado.