La economía se ha desarrollado sobre la noción de individualidad. Esta noción supone una ruptura en las relaciones entre los seres humanos, y el establecimiento de una instancia externa que establece las relaciones sociales entre los individuos. La economía se despliega como horizonte de certeza basándose en el principio del individuo como un ser humano egoísta, y ello permite el establecimiento de una relación calculable entre individuos como un ser humano egoísta, y su posesión de los objetos a través del dinero. (A.)