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Introducción. En la actualidad, exinten claras evidencias de la importancia de la respuesta inflamatoria que aparece después de un ictus. Tanto la lesión cerebral traumática como la isquémica se caracterizan por inflamación local y cambios en las concentraciones de citocinas en los líquidos corporales del cuerpo humano. Sin embargo, muy pocos estudios han dirigido su atención a establecer el papel y la relación entre ictus hemorrágico e inflamación. Desarrollo. Inmediatamente después del sangrado parenquimatoso cerebral, mediadores inflamatorios provenientes del torrente sanguíneo alcanzan el cerebro e inducen una respuesta inflamatoria, sin olvidar que las células cerebrales por sí mismas, son capaces de sintetizar tales agentes. Mas aún, los marcadores de inflamación contribuyen al desencadenamiento de una respuesta inflamatoria sistémica. Entre dichos marcadores, ha recibido una atención especial la proteína C reactiva (PCR). Niveles séricos elevados de PCR, reactante de fase aguda del proceso inflamatorio se presentan en individuos con riesgo de padecer episodios cardiovasculares o cerebrovasculares y, además, predicen el resultado final. Conclusión. Presentamos las escasas evidencias disponibles acerca de la relación entre inflamación y hemorragia intracerebral.
