Ivonne Alejandra Toledo Nieto, José G. Sánchez
Se explora la influencia de la autoconciencia emocional en el rendimiento académico en matemáticas en estudiantes de bachillerato, a través de la implementación de una estrategia pedagógica denominada “Semanario de Aprendizaje”. La autoconciencia emocional —la capacidad de reconocer y comprender las propias emociones—resulta especialmente relevante en el aprendizaje matemático, donde emociones como la ansiedad y la frustración pueden afectar negativamente el desempeño. En este contexto, herramientas reflexivas como los diarios de aprendizaje permiten fortalecer la autoeficacia académica y la regulación emocional. La investigación, de tipo cualitativo y descriptivo, se desarrolló con 76 estudiantes de quinto semestre de bachillerato (16-18 años) inscritos en la asignatura de cálculo. El instrumento central fue el “Semanario de Aprendizaje”, un diario reflexivo en el que el estudiantado registró sus experiencias emocionales y académicas relacionadas con temas como la razón de cambio y la derivación. A diferencia de un diario convencional, esta herramienta no se completa diariamente, sino que invita a una mirada retrospectiva de lo vivido en la semana. Al finalizar el periodo de seis semanas, se aplicó un cuestionario para conocer la percepción general sobre la utilidad del recurso. Este estudio se enmarca en el modelo cognitivo de las emociones propuesto por Ortony, Clore y Collins (1988), conocido como modelo OCC. Dicho modelo postula que las emociones surgen a partir de valoraciones cognitivas sobre eventos, acciones de agentes y características de objetos, en función de su relevancia para los objetivos y creencias del individuo. Esta perspectiva permite analizar cómo las emociones, como la ansiedad o la curiosidad, influyen en el proceso de aprendizaje matemático, afectando la motivación, la atención y la autorregulación del estudiante. Los resultados revelaron una ligera predominancia de emociones positivas sobre las negativas. Entre las emociones más frecuentes destacaron el “interés”, la “felicidad” y la “curiosidad”, aunque también se identificaron “confusión” y “frustración”. Del cuestionario emergió que el 95% del estudiantado consideró útil el Semanario para identificar y gestionar sus emociones durante el aprendizaje. Además, un 45% experimentó satisfacción y alegría al superar dificultades, mientras que un 25% manifestó mejoras en su autorregulación emocional. En términos metacognitivos, el 75% señaló que la herramienta les ayudó a reflexionar sobre su progreso, detectar áreas de mejora y consolidar aprendizajes. En conjunto, los hallazgos sugieren que el “Semanario de Aprendizaje” es una herramienta eficaz no solo para profundizar en contenidos matemáticos, sino también para promover el bienestar emocional y desarrollar habilidades de reflexión y autoconocimiento en estudiantes de nivel medio superior.
The influence of emotional self-awareness on academic performance in mathematics among high school students is explored through the implementation of a pedagogical strategy called the Learning weeklyJournal. Emotional self-awareness is particularly relevant in mathematics learning, where emotions such as anxiety and frustration can negatively impact performance. In this context, reflective tools like learning journals help strengthen academic self-efficacy and emotional regulation.This qualitative and descriptive study was conducted with 76 fifth-semester high school students (ages 16–18) enrolled in a calculus course. The main instrument was the Learning Weekly Journal, a reflective diary in which students recorded their emotional and academic experiences related to topics such as rate of change and differentiation. Unlike a conventional diary, this tool is not completed daily; instead, it invites a retrospective look at the week’s learning experiences. At the end of the six-week period, a questionnaire was administered to gather general perceptions about the usefulness of the resource.This study is framed within the cognitive model of emotions proposed by Ortony, Clore, and Collins (1988), known as the OCC model. This model posits that emotions arise from cognitive evaluations of events, agents’ actions, and object characteristics, based on their relevance to an individual's goals and beliefs. This perspective allows for an analysis of how emotions—such as anxiety or curiosity—affect the mathematics learning process by influencing motivation, attention, and student self-regulation.The results revealed a slight predominance of positive emotions over negative ones. Among the most frequently reported emotions were “interest,” “happiness,” and “curiosity,” although “confusion” and “frustration” were also noted. According to the questionnaire, 95% of the students considered the Learning Weekly Journal useful for identifying and managing their emotions during learning. Additionally, 45% reported experiencing satisfaction and joy upon overcoming difficulties, while 25% indicated improvements in their emotional self-regulation. From a metacognitive perspective, 75% stated that the tool helped them reflect on their progress, identify areas for improvement, and consolidate their learning.Overall, the findings suggest that the Learning Weekly Journalis an effective tool not only for deepening understanding of mathematical content but also for promoting emotional well-being and developing reflection and self-awareness skills in upper secondary students.