Eréndira Valdez Piña, Jennifer Lira Mandujano, Rodrigo Erick Escartín Pérez
Debido a que el estrés se relaciona con el consumo de tabaco, la recaída y la dificultad para dejar de fumar, se recomienda incorporar estrategias para la gestión del estrés en los tratamientos para dejar de fumar. El objetivo del estudio fue conocer si existen diferencias estadísticamente significativas en el patrón de consumo entre grupos a los que se aplicó una intervención telefónica para dejar de fumar y un entrenamiento para la gestión del estrés en diferentes momentos. Participaron 57 fumadores asignados aleatoriamente a uno de tres grupos, grupo 1 tuvo el entrenamiento para gestionar el estrés antes de la intervención para dejar de fumar; grupo 2, recibió el entrenamiento para la gestión del estrés a la par de la intervención para dejar de fumar y grupo 3 recibió la intervención para dejar de fumar. Se obtuvo el patrón de consumo antes, al final de la intervención, y seguimientos a uno, tres y seis meses. Los resultados mostraron una disminución estadísticamente significativa en el patrón de consumo a lo largo del tiempo, pero al comparar los grupos no se encontraron diferencias entre ellos. Sin embargo, los grupos que recibieron el entrenamiento para la gestión del estrés fueron igual de efectivos en la reducción del patrón de consumo, además si las personas aprenden a gestionar el estrés antes de la intervención para dejar de fumar existe una disminución estadísticamente significativa en el estrés percibido a los seis meses de seguimiento, lo cual puede ayudar a mantener la abstinencia a largo plazo.
Because stress is related to tobacco use, smoking relapse and the difficulty of quitting smoking, it is recommended to incorporate strategies for stress management training in smoking cessation treatment. The objective of study was to know if there are statistically significant differences in the consumption pattern among groups in which a smoking cessation intervention and stress management training are applied at different times. 57 smokers participated who were assigned by randomization to one of three groups, group 1, stress management training before the smoking cessation intervention; group 2, the stress management training simultaneously with the smoking cessation intervention and group 3 will receive the smoking cessation intervention. The consumption pattern was obtained before, at the end of the intervention, and the follow-up at one, three and six months. The results showed a decrease statistically significantly in the consumption pattern over time, but when comparing the groups, no significant differences were found. However, the groups that received the stress management training were equally effective in reducing consumption pattern, in addition, if people learn to manage stress before the smoking cessation intervention, there is a statistically significant decrease in perceived stress at six-month follow-up, which can help maintain long-term abstinence.