Zaragoza, España
La sexualidad de las personas con discapacidad intelectual continúa siendo un área controvertida y difícil de abordar para profesionales y familiares. La finalidad del presente estudio es analizar la vivencia de la sexualidad y la expresión erótica de las personas con discapacidad intelectual residentes en un centro, comparando sus opiniones, actitudes y necesidades con las expresadas por el equipo profesional y las familias. El estudio, de carácter cualitativo y evaluativo, se desarrolló mediante tres grupos de discusión: residentes, familiares y profesionales, estructurados según tres temáticas: a) fortalezas y apoyos positivos, b) barreras y limitaciones y c) propuestas de mejora. La información obtenida se analizó de forma sistemática utilizando el software MAXQDA24. Entre otros aspectos, el análisis pone de manifiesto el cambio en la cultura sexual del centro, derivado de la adopción de un modelo de atención centrado en la persona, que obliga a tener en cuenta la dimensión sexual y, por lo tanto, adoptar nuevas estrategias y prácticas que faciliten la vivencia positiva de la sexualidad y la libre expresión erótica de las personas residentes en el centro.
The sexuality of people with intellectual disabilities remains a controversial and difficult area to address for professionals and families. The purpose of this study is to analyze the experience of sexuality and erotic expression of people with intellectual disabilities living in a center, comparing their opinions, attitudes and needs with those expressed by the professional team and families. The study, of a qualitative and evaluative nature, was developed through three discussion groups: residents, family members and professionals, structured around three themes: a) strengths and positive support, b) barriers and limitations, and c) proposals for improvement. The information obtained was systematically analyzed using MAXQDA24 software. Among other aspects, the analysis highlights the change in the sexual culture of the center, derived from the adoption of a person-centered care model, which makes it necessary to take into account the sexual dimension and, therefore, to adopt new strategies and practices that facilitate the positive experience of sexuality and the free erotic expression of the people residing in the center.